El Jubileo, el nuevo inicio

Peregrinación a la sede del papa con chicos de secundaria. La reseña de un seminarista.

Sanpietro Vaticano Unsplash
Basílica de San Pedro, Ciudad del Vaticano.

En estas navidades, nuestra Casa de formación participó en la misa de San Pedro con la que inició el Año Santo; un evento que está marcando durante este año la vida de la Iglesia, en el que tuvimos la gracia de estar presentes. El mensaje que nos dirigió el papa Francisco durante la homilía fue muy significativo: «con la apertura de la Puerta Santa damos inicio a un nuevo Jubileo. Cada uno de nosotros puede entrar en el misterio de este anuncio de gracia. En esta noche, la puerta de la esperanza se ha abierto de par en par al mundo (…) El Jubileo se abre para que a todos les sea dada la esperanza, la esperanza del Evangelio, la esperanza del amor, la esperanza del perdón (…) en esta noche la “puerta santa” del corazón de Dios se abre para ti. Jesús, Dios con nosotros, nace para ti, para mí, para nosotros, para todo hombre y mujer. Y, ¿saben?, con Él florece la alegría, con Él la vida cambia, con Él la esperanza no defrauda».

¿De qué modo nos disponemos a acoger el don de esta virtud y el perdón que lava cada una de las culpas y penas? La tradición de la Iglesia, que el mismo papa recordaba en la bula de convocatoria del Jubileo, viene en nuestra ayuda: «la peregrinación expresa un elemento fundamental de todo acontecimiento jubilar (…) También el año próximo los peregrinos de esperanza recorrerán caminos antiguos y modernos para vivir intensamente la experiencia jubilar».

“Por eso nos hacemos peregrinos: venimos a pedir un don, venimos a retomar el camino de la vida”

Los Cavalieri se pusieron en camino de todas partes de Italia (y no solo), para poder acudir a la primera audiencia jubilar ofrecida por el pontífice el pasado sábado 11 de enero y para recibir la indulgencia atravesando la Puerta Santa de la basílica vaticana. Algunos seminaristas tuvimos la ocasión de acompañar a los grupos de chicos de secundaria con los que hacemos caritativa y junto a ellos pedimos a Dios poder volver a empezar, siguiendo la invitación que se nos hizo en varios momentos durante la audiencia: «El Jubileo es un nuevo inicio, la posibilidad para todos de volver a empezar partiendo de Dios».

Con el Jubileo comienza una nueva vida, una nueva etapa (…). Por eso nos hacemos peregrinos: venimos a pedir un don, venimos a retomar el camino de la vida». El momento con el Santo Padre fue breve pero significativo. Fue bonito ver cómo miles de chicos cansados por el largo viaje, respondían con brío al saludo que el papa les dirigía explícitamente a ellos.

Cuando finalizó la audiencia, atravesamos la Puerta Santa y, a pesar de la larga espera y el hambre que teníamos, algunos de los chicos se pusieron a rezar en algunas de las capillas laterales donde estaba expuesto el Santísimo. A continuación, todos juntos rezamos por las intenciones del Santo Padre. Pudimos pasar la tarde junto a los grupos del Lazio. Este día precioso concluyó con la Santa Misa.

Contenido relacionado

Ver todo
  • Testimonios

Sin palabras

Cuando ya no quedan palabras, la única respuesta adecuada es la presencia de Cristo.

  • Martino De Carli
Leer
  • Galería

Semana Santa de los niños

Seis días de catequesis, talleres, cantos y juegos como preparación para la resurrección de Jesús.

  • Ciudad de México
Leer